Elecciones en El Salvador: lo que hay que saber

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Este domingo, Nayib Bukele se dispone a reelegirse con facilidad. Sus medidas enérgicas contra las pandillas, a costa de la restricción de las libertades civiles, le han acarreado un enorme apoyo.

Juristas afirman que el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, está violando una prohibición constitucional al buscar un segundo mandato consecutivo.Credit…Dave Sanders para The New York Times
Gabriel Labrador y 

Gabriel Labrador reportó desde San Salvador, y Natalie Kitroeff desde Ciudad de México.

4 de febrero de 2024 a las 05:05 ET

En las elecciones presidenciales de El Salvador de este domingo, no hay una verdadera competencia: se espera que Nayib Bukele, el presidente milénial que reconfiguró el país con una serie de medidas enérgicas contra las pandillas y las libertades civiles, gane la reelección de forma aplastante.

Los juristas afirman que Bukele, de 42 años, está violando una prohibición constitucional al buscar un segundo mandato consecutivo, algo que a la mayoría de los salvadoreños parece no importarle.

Las encuestas muestran que los electores apoyan de manera abrumadora la candidatura de Bukele y que probablemente consolidarán la supermayoría de su partido en la Asamblea Legislativa el domingo, lo que extendería el control irrestricto del presidente sobre cada rama del gobierno durante años.

“Quieren demostrar que pueden hacerlo, que tienen el apoyo popular para hacerlo, y quieren que todos simplemente se resignen a ello, sin importar lo que diga la Constitución”, afirmó Ricardo Zuniga, que fungió como enviado especial del Departamento de Estado de EE. UU. a Centroamérica durante la presidencia de Biden. “Es una demostración de poder”.

Casi el 80 por ciento de los salvadoreños afirmó en una encuesta reciente que apoyaba la candidatura de Bukele. La misma encuesta reveló que su partido, Nuevas Ideas, podría obtener hasta 57 de los 60 escaños de la Asamblea Legislativa, después de que se realizaron cambios en la composición del órgano legislativo que, según los analistas, beneficiaron al partido de gobierno.

El argumento más fuerte de la candidatura de Bukele ha sido los casi dos años de estado de excepción que su gobierno impuso luego de que las pandillas criminales que hacía mucho tiempo dominaban las calles cometieron una ola de asesinatos en marzo de 2022.

Las autoridades han arrestado a unas 75.000 personas desde entonces, sin el debido proceso, y han suspendido de manera indefinida derechos constitucionales fundamentales.

Pero la transformación del país ha sido innegable. Las tres pandillas que convirtieron al país en uno de los lugares más violentos del mundo han perdido todo vestigio de poder.

“El principal pilar sobre el que ha construido este respaldo social es lo que ha hecho el gobierno en materia de seguridad”, afirmó Omar Serrano, vicerrector de Proyección Social de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas. “El estado de excepción es lo que la gente más valora”.

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Imanes de refrigerador con la imagen de Bukele en un mercado en el centro de San Salvador. Credit…Fred Ramos para The New York Times
Bukele, descendiente de una familia de migrantes palestinos que llegaron a Centroamérica a principios del siglo XX, es uno de 10 hermanos y medio hermanos criados en la Escalón, una colonia de clase media alta en San Salvador, la capital. Bukele estudió en un colegio bilingüe de élite.

En 2011, tras trabajar como publicista en varias campañas electorales, Bukele se trasladó a la política y rápidamente saltó a la fama. Con 30 años, se convirtió en alcalde de Nuevo Cuscatlán, un pequeño municipio a las afueras de San Salvador, representando al partido de izquierda Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).

Tres años después se convirtió en alcalde de San Salvador, un cargo considerado un trampolín para la presidencia. En vísperas de las elecciones presidenciales de 2019, Bukele fundó su propio partido, Nuevas Ideas, pero se postuló como el candidato de un pequeño partido de derecha, GANA, a fin de cumplir con los requerimientos legales para competir. Obtuvo la victoria gracias a la promesa de romper con la política corrupta del pasado.

Sin embargo, una vez en la presidencia, Bukele viró hacia tácticas que muchos percibieron como un retorno al liderazgo autocrático por el que el país había librado una guerra civil de 12 años.

Bukele envió soldados a la Asamblea Legislativa para presionar a los congresistas a aprobar financiación para el gobierno y luego remplazó a un fiscal general que investigaba casos de corrupción en su gestión.

En 2021, tras ganar la mayoría absoluta en la Asamblea Legislativa, su partido remplazó a los jueces principales de la Corte Suprema, la cual pocos meses después reinterpretó la Constitución para permitirle competir de nuevo por la presidencia.

Sin embargo, su atractivo apenas ha menguado en el país y entre un notable contingente de fanáticos en todo el hemisferio. Políticos de Colombia y Ecuador han prometido emularlo.

Erlinda Vela Gutiérrez, quien tiene un pequeño puesto de cachivaches en un mercado de San Salvador, dijo que una oleada de turistas le habían pedido artículos con el rostro del hombre al que llama “mi presidente querido”. Tiene imanes, tazas, llaveros y muñecos.

Vela Gutiérrez, que vive en Las Margaritas, un barrio a las afueras de San Salvador que solía ser territorio de la despiadada pandilla MS-13, afirmó que no le preocupaba si Bukele estaba violando algunas leyes .

“Si 10 veces iba de presidente, 10 veces lo voy a aceptar”, dijo. Contó que ya le ha enviado a su familia en Maryland una encomienda de “cachuchas, de camisas, de jackets, solo de Bukele”.

Estas serán las primeras elecciones en las que los salvadoreños que viven en el exterior votarán en masa, luego de que el gobierno permitió el sufragio por adelantado a través de una aplicación, una medida que los analistas afirman fue diseñada para aprovechar la popularidad de Bukele entre quienes migraron a Estados Unidos.

Más de 140.000 salvadoreños en el exterior ya han emitido su voto, en comparación con los menos de 4000 en las elecciones pasadas, hace 5 años. La votación se ha incrementado en estados con grandes comunidades salvadoreñas, como Virginia, California y Nueva York.

Los cinco candidatos presidenciales de la oposición no han logrado casi ningún avance en las encuestas. Entre ellos se encuentran contendientes del partido de derecha ARENA y del partido de izquierda FMLN, los cuales dominaron la política salvadoreña por 30 años.

Natalie Kitroeff es jefa de la corresponsalía del Times en México, Centroamérica y el Caribe. Más de Natalie Kitroeff

Fuente:https://www.nytimes.com/es/2024/02/04/espanol/elecciones-el-salvador-bukele.html