El futuro político de los Monreal

El futuro político de los Monreal

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Ricardo Monreal ha superado el proceso interno. De hecho, siempre ha estado consciente de lo que aconteció en el ejercicio de . De esa forma, hizo cumplir su palabra y, como sabemos, ha cerrado filas con el presidente López Obrador y Claudia Sheinbaum, heredera del bastón de mando para el proceso electoral que está en vísperas de arrancar. En ese sentido, la coordinadora de los trabajos de defensa lo nombró, para los desafíos que están en puerta, coordinador de campaña en rubros de organización, planeación y logística, lo que fue, políticamente hablando, una decisión muy atinada por la sapiencia del zacatecano y, sobre todo, por la capacidad de diálogo y conciliación.

Y una vez que Monreal quedó al frente de esas tareas, Claudia Sheinbaum tiene la garantía y la certeza que tendrá una campaña de mucho nivel político. Esta incorporación, junto a otros cuadros que se han ido sumando, es crucial en el armado de la futura candidata de Morena. Sabemos que, desde este momento, hay un trabajo intenso y, en muchos rubros importantes, han apretado el paso en el diseño de lo que será, no hay duda de ello, el proceso ganador, pues el ambiente político, en ese sentido, es altamente favorable para Morena, de acuerdo a todas las encuestas de opinión pública.

La cuestión es que Ricardo Monreal, con ese olfato y perspicacia, no se confía. De hecho, tras bambalinas, ha pedido redoblar esfuerzos en distintos ámbitos que está coordinando. Uno de ellos, claro está, la logística y la planeación territorial con un equipo potencialmente competitivo que, dicho sea de paso, ha llevado tareas en varios escenarios o coyunturas. Es decir, el nombre de Monreal es como una concepción cuyo significado es muy amplio. Lo primero que debemos tomar en cuenta es su equipo de trabajo.

De entrada, Néstor Núñez, gente cercana a Ricardo Monreal, coordinará los trabajos en la segunda circunscripción. En ese sentido, el exalcalde en Cuauhtémoc tiene muchas semanas trabajando en puntos estratégicos como Zacatecas, Guanajuato, San Luis Potosí, Tamaulipas y Coahuila. De hecho, se nota la mano de Núñez al frente de esa tarea al incorporar, desde hace algunos días, mecanismos y estrategias para posicionar a Claudia Sheinbaum.

Lo mismo Ricardo Monreal, pieza clave del armado a nivel nacional. Y desde el momento que el zacatecano se convirtió en coordinador de la campaña, las condiciones políticas para él, en un futuro corto, son muy prometedoras. Ya lo dijo Monreal: “un político jamás se retira de esa función”. Esto significa que, una vez que el movimiento triunfe en las elecciones del 2024, sin caer en excesos de confianza, el panorama para el exlíder de los senadores luce favorable en una posición estratégica para seguir abonando a la transformación de la vida pública del país.

Y cómo rendirá buenas cuentas y un trabajo de calidad en la campaña, Claudia Sheinbaum, en un posible escenario, puede nombrarlo secretario de Gobierno. Si nos guiamos por la capacidad negociadora para resolver temas cruciales, quién mejor que él. Ahora, si la consigna es, como está aconteciendo en el legislativo, para continuar asentando cambios al marco constitucional, Ricardo Monreal puede ser nuevamente el líder de los legisladores de Morena en la Cámara Alta. Al menos eso visualizó por el nivel y potencial de Monreal.

Caso similar viven los Monreal en el mapa electoral venidero. En Zacatecas, por ejemplo, Saúl Monreal es ampliamente favorito para encabezar la fórmula del Senado de la República con Morena. Tiene, además de la experiencia, una estructura a lo largo y ancho de la entidad del norte del país. O sea, es un liderazgo consagrado que, para todo reto que se presente, ha demostrado estar a la altura de cualquier circunstancia. Incluso, eso lo reconocen las propias encuestas que, desde todos ángulos, anticipan buenos positivos para el hermano menor de los Monreal.

Y por si eso fuese poco, Catalina Monreal, hija de Ricardo Monreal, tiene todo para ganar el proceso interno de Morena en la alcaldía Cuauhtémoc. Lo mejor de ello es que, su hipotética nominación, le traerá un nivel de competencia muy importante al lopezobradorismo. Algo así como la diferencia para recuperar, ni más ni menos, uno de los bastiones más trascendentales en el corazón de la patria. De hecho, nos encontramos en un punto clave para que Morena tome esa decisión y, con ello, regresar a las filas del partido guinda una demarcación de un valor muy significativo para el presidente López Obrador.

A propósito, Santos González, que por la cercanía podemos considerarlo del primer círculo de Monreal, nos cuentan, levantará la mano para buscar un puesto de elección popular en Zacatecas. Es, además de un cuadro joven, un político y catedrático que ha demostrado eso que se necesita para incursionar en estos ambientes electorales. Es, actualmente, coordinador de asesores en la Cámara Alta y, además de ello, una carta que aprendió muy bien las buenas enseñanzas de Ricardo Monreal. O sea, tiene elocuencia, facilidad de palabra y diálogo con todos los sectores sociales.

O sea, hay Monreal por mucho rato más.

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