Según se había especulado durante meses, el gobernador Samuel García buscará la candidatura presidencial por Movimiento Ciudadano. El pasado jueves trascendió que el Congreso de Nuevo León había aprobado finalmente por mayoría de votos la concesión de la licencia por 6 meses al mandatario estatal.
Esto sucedió apenas unas horas después de que AMLO apoyase, en su estilo, la candidatura presidencial de García. “Le deseo lo mejor” expresó el jefe del Estado mexicano. La reunión, pues, del gobernador con el presidente mexicano horas previas al anuncio de la decisión del Congreso local ha levantado cuestionamientos, y, desde luego, acusaciones.
No hay duda de que la eventual candidatura de Samuel García sería un varapalo para Xóchitl Gálvez. A diferencia de lo que hubiese ocurrido con Marcelo Ebrard como candidato de Movimiento Ciudadano, la presencia del neoleonés bajo las siglas de este partido sí que podría favorecer la tendencia – aun más- hacia la victoria de Claudia Sheinbaum.
Mientras la candidatura de Ebrard por MC habría dado aires a la oposición, pues muchos de los morenistas moderados y descontentos con el curso de la 4T habrían estado dispuestos a ofrecerle su apoyo aun bajo otras siglas (lo que se habría traducido en una pérdida nada despreciable de votos para Claudia) el rostro de García ofrece la posibilidad a todos aquellos votantes que aseguran no estar dispuestos a votar por los partidos corruptos de siempre (léase, el PRI y el PAN) pero tampoco estiman apoyar a Claudia para una nueva versión del lopezobradorismo.
Estos votantes, lejos de apoyar un cambio, lo que harán en los hechos es restar votos al Frente Amplio por México, el cual quedará vulnerable ante la popularidad de AMLO reflejada en su candidata, y también, frente a la maquinaria de Estado morenista representado por gobernadores, alcaldes y el propio presidente. La próxima decisión en torno a la candidatura de García recaerá en Dante Delgado.
A reserva de conocer los resultados de la elección de 2024, la separación del cargo conllevará posibles consecuencias políticas para el gobernador una vez que haya vuelto a Monterrey como candidato perdedor de las elecciones.
En suma, la candidatura eventual de Samuel (no existe aún una postura oficial de MC tras el anuncio del Congreso de Nuevo León, derivado, entre otros factores, de la estricta legislación electoral) podría, a reserva de que las campañas sufran un giro inesperado, asegurar la victoria de Claudia Sheinbaum ante la indeseable división del voto opositor provocado por la candidatura de García. Todo apunta, al día de hoy, hacia una nueva victoria morenista.
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