Para Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez el crimen organizado no tiene el mismo significado.
Para la ex jefa de gobierno los cárteles son un aliado, para la senadora son un enemigo a vencer. Para Claudia van a ser sus compañeros de viaje durante la campaña, operadores y patrocinadores electorales. Para Xóchitl los peores enemigos de su integridad física y política.
Hay muchas diferencias entre una y otra, pero la relación que tiene cada una con la delincuencia las separa y define completamente. Morena, el partido de la candidata oficial, acostumbra ganar elecciones de la mano de sicarios. El Frente Amplio integrado por PAN-PRI-PRD sólo puede echar mano del voto voluntario.
Así que de ganar Claudia Sheinbaum el 2024 llegaría al poder una presidenta que le debería el favor a los cárteles y tendría –como hoy lo hace López Obrador– que dar continuidad a los “abrazos y no balazos”.
Más aún. Estaría obligada a darles más poder porque si bien AMLO pudo haber recibido financiamiento del narco en el 2018, lo cierto es que ganó la presidencia gracias al pacto de impunidad con Enrique Peña Nieto.
La ex jefa de gobierno contaría con toda la maquinaria del Estado para ganar la presidencia, pero Morena necesita apoderarse del Congreso al costo que sea para dar continuidad al proyecto político de López Obrador. Como decían los viejos priistas: van por el “carro completo” y para eso necesitan el apoyo de la delincuencia.
Xóchitl no es la candidata de los cárteles. Claudia, sí. Sheinbaum no solo cuenta con los 20 mil servidores de la nación que hoy dispersan los apoyos sociales sino con la clientela que ha construido la delincuencia en varios municipios del país.
El aplauso de los habitantes de San Gregorio, Chiapas al convoy de camionetas del Cártel de Sinaloa nos dice que el grupo delincuencial más cercano al gobierno tiene un fuerte liderazgo social que podría poner al servicio de los candidatos de Morena.
Y si hay alguna duda de que el Cártel de Sinaloa sirve a los intereses del régimen ahí está la respuesta indiferente de López Obrador a la entrada triunfal de los criminales: “Estos delincuentes como son buenos para la propaganda”.
Ese no es el punto. Lo importante es que el crimen organizado está sustituyendo al gobierno. Que la autoridad está dejando vacíos llenados por los narcos. Que instituciones, como el Ejército, son desplazados por terroristas para combatir a otros criminales.
Xóchitl agradeció al presidente y a SEDENA la propuesta para darle seguridad. Ella sí la necesita, Sheinbaum no. Esta, será protegida por la oscura estructura que ha venido construyendo López a lo largo de cinco años para garantizar que Morena permanezca en el poder.
La primera diferencia de fondo entre dos mujeres que aspiran al poder es simple. Detrás de Xóchitl hay ciudadanos. Detrás de Claudia hay narcos.
@PagesBeatriz
También te puede interesar leer
La entrada Detrás de Xóchitl: ciudadanos; detrás de Claudia: narcos apareció primero en Siempre!.
This content was originally published here.